El Perú es un productor de cocaína, una industria ilegal que promueve el crimen y daña a las comunidades rurales. USAID apoya la Política Nacional de Lucha contra las Drogas del Gobierno de Perú (GOP), ofrece alternativas al cultivo ilícito de coca y fortalece la capacidad del GOP para enfrentar a las mafias de la droga. Este modelo ha sido muy exitoso y ha sacado a miles de familias rurales peruanas de la pobreza, alejándolas del cultivo ilícito de la coca.